Cuando Florentino Ariza separo a su hija Fermina Daza de Florentino Ariza, y se la llevo lejos, ella sufrió mucho en un mundo tan distinto que no era para nada el suyo, no hubo ningún momento en que Florentino no pasara por sus pensamientos, aun así, con la distancia como peor enemigo, no se dejaron de comunicar a través de sus cartas, eso es lo que les daba fuerzas para seguir adelante y soportar todo, Florentino Ariza en una de las tantas cartas, en las cuales de hecho, ya hablaban como marido y mujer, le prometió rescatar el tesoro de un barco que se hundió muchos años atrás y que nadie se había atrevido a rescatar porque se pensaba que estaba muchos metros bajo el océano, Forentino hizo todo lo posible por rescatar el tesoro y demostrarle a su gran amor que él era capaz de todo por su felicidad, total que consiguió los recursos para lograrlo, aunque no logro rescatarlo, consiguió las pruebas necesarias para demostrarle que lo de la historia del tesoro era cierta y no solo una leyenda.
después de mucho tiempo, Fermina Daza por fin regresaba a donde dejo pendiente una historia de amor, aunque tuvieron algunos problemas para desembarcar a causa de las mareas, llego el tan esperado día por Fermina y Florentino, al llegar lo único que deseaban era mirarse a los ojos y decirse uno al otro lo mucho que se amaban, pero eso no sucedió, ya que cuando tuvieron la primera oportunidad de verse frente a frente, lo primero que sintió Fermina fue lastima por él, y le pidió no volverla a buscar nunca más, Florentino no supo la razón de ese cambio de actitud hacia el tan repentino, tal vez no era lo que Fermina Daza esperaba con tanto anhelo.
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